El Mito de la Media Naranja: La tontería que me costó varios años de terapia
Fui un romántico tonto. De esos que creen que el propósito de la vida es encontrar a esa persona que tiene exactamente la pieza faltante de tu alma, la que te hará sentir completo.
Yo no buscaba una pareja; buscaba un kit de reparación personal. Quería que esa "media naranja" viniera, me pusiera en orden las neuronas, me pagara las deudas emocionales y, de paso, me recordara sacar la basura.
Mi primera gran tonteriafue creer que yo era solo "mitad". Y la segunda fue creer que alguien más era lo suficientemente brillante y abnegado como para querer unirse a mi caos a medio terminar.
La Mentira Más Cara
¿Saben qué pasa cuando encuentras a tu supuesta "media naranja"? Dos cosas:
Te vuelves un huevón funcional. Dejas de hacer el trabajo. "Como ya tengo a mi mitad, ella/él se encargará de mis problemas de inseguridad, mis metas de fitness y mis crisis existenciales." Falso. Tu pareja no es tu terapeuta, ni tu life coach, ni tu tarado salvador. Es otra persona tan dañada como tú, pero con diferentes traumas.
Proyectas el fracaso. Cuando te sientes incompleto, la culpa es automáticamente de la otra mitad. Si no eres feliz, es porque ella no te está completando bien. Si sigues sintiéndote vacío, es que él no es "El Indicado". Y así, vas rompiendo relaciones geniales porque le pusiste la etiqueta mágica de "debe arreglarme" a una persona.
El Día que la Naranja se Puso Ácida
Recuerdo el día que me di cuenta de eso . Estaba en una relación increíblemente estable, y aun así, sentía un vacío enorme. Me quejé con un amigo (que ya estaba harto de mis dramas) y le dije: "Es que siento que todavía me falta algo, creo que [Mi pareja] no me complementa..."
Mi amigo me miró, se tomó su cerveza y me dijo la verdad más fea y liberadora:
"A lo mejor no es ella la incompleta, tarado. A lo mejor el hueco que sientes no se llena con otra persona. A lo mejor es solo que eres un desastre a tiempo completo."
¡Zas! Doloroso, pero honesto. Yo no necesitaba una media naranja; necesitaba un psicólogo y dos kilos de autoestima propia.
La Lección del Ex-Pendejo
Si hoy te doy un consejo inteligente, es porque ya sufrí la pendejada de buscar la perfección en otro ser humano.
El verdadero secreto no es buscar a tu media naranja. Es darte cuenta de que ya eres una fruta entera, con semillas y magulladuras, pero completa.
Lo que buscas en una relación no es completarte, es compartir. No necesitas a alguien para que te arregle; necesitas a alguien que te quiera lo suficiente como para reírse contigo.
Tu pareja debe ser tu postre favorito, no el plato principal que te alimenta la vida.
Deja de ser medio. Sé entero. Y el día que encuentres a otra fruta entera, será una canasta increíble, no un mal remiendo.